Uxía García, la joven gallega con discapacidad visual, ha logrado que se suspenda provisionalmente su cese como maestra en Canarias. Esta decisión llega tras un intenso debate entre la Consejería de Educación y representantes de entidades como la ONCE y el CERMI.

Uxía aprobó una oposición para una plaza reservada a personas con discapacidad en Pedagogía Terapéutica, pero fue declarada “no apta” por un tribunal médico debido a su retinosis pigmentaria, una enfermedad que le causa una discapacidad visual del 66%. Este informe médico contradijo otros informes emitidos por organismos como la Xunta de Galicia y el Sergas, que avalaban su plena capacidad para ejercer.

Aunque su reincorporación es provisional y no en calidad de funcionaria de carrera, Uxía celebra este primer paso mientras continúa defendiendo sus derechos. “La discriminación que sufrí fue insultante. No descansaré hasta que se haga justicia, no solo por mí, sino por todas las personas con discapacidad que enfrentan situaciones similares”, afirma la docente.

Desde nuestra Fundación, destacamos la importancia de esta lucha como un ejemplo del trabajo que queda por hacer para garantizar la igualdad real en el ámbito laboral para las personas con discapacidad.

Seguiremos atentos a este caso y apoyando a Uxía y a quienes, como ella, enfrentan barreras que vulneran sus derechos.